Apresada en el valle de la humedad de mis fosas nasales, me la he pasado tejiendo
pashminas de ensueño.
los resultados han sido buenos.
han abrigado mi cuello, lo mantuvieron vivo, mis accesorios se lograron también gracias a la lana de mis corderitos, uno dos, un dos tres, pero hablando a conciencia la garganta a estado siempre insatisfecha esta vez no me olvide de ella, le toco una dosis de amoxicilina, y ya esta poco a poco volviendo a sonreir..
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